Los 
                Diarios   | 
          
           
            |  Diario de 
              Saavedro | 
          
        
        Nota del Equipo Expedicionario:
        Este libro fué encontrado en la base de la Gran Torre, sobre 
          la hamaca.
        Visiblemente, en el libro faltan hojas, que se encontrarán en 
          el curso de la aventura, para ser intercaladas en sus correspondientes 
          lugares. Por esto, la numeración de las páginas se rige 
          por las cifras originales:
        
        Donde hay más de un dígito, es el primero 
          el que indica el orden, como si hubiera un punto decimal después 
          del primer dígito:
        1. — 1.4 — 2.1 — 3. — 
          3.52 — 4.1 — 5.
        Donde las páginas no se correspondieren con los originales, 
          habrá una letra suplementaria, separada por un guión:
        1.3 — 1.3-a — 1.3-B — 1.3-C 
          — 1.4
        Este número de página estará en la cabeza de página, 
          junto con una eventual observación de dónde se la ha encontrado.
          
        
        - 1. -
        
        (Hoja encontrada en Voltaic, en 
          el túnel)
         Me empieza a volver. Poco a poco. El conocimiento de quién 
          soy. De cuánto tiempo llevo atrapado aquí. Confuso en 
          su mayor parte. Grandes bloques de tiempo todavía flotando en 
          la niebla que se alimenta de mi mente. Pero si me concentro, recupero 
          algunas partes.
        Fue el sueño lo primero que me ayudó a recordar. Estaba 
          tumbado en los juncos, cerca del colmillo.
          No sé cuánto tiempo, ni cómo llegué aquí. 
          Miro fijamente al cielo. Veo a un hombre salir del acantilado. Primero, 
          su cabeza. Luego, sus hombros. a continuación, su torso. La luz 
          del sol envuelve su cuerpo como un halo. No me puedo mover. Creo que 
          la Muerte por fin ha venido a por mí.
        El hombre está de pie sobre el acantilado con un libro en la 
          mano, mirando fijamente hacia abajo, hacia la laguna, como si algo le 
          entristeciera. Quería llamarle. Decirle que era yo a quien había 
          venido a buscar. Pero tenía la boca seca. No recuerdo las palabras. 
          Y antes de decidirme a ponerme de pie, abre el libro. Pone la mano en 
          la página. Y se deshace en polvo.
        Me pareció como un sueño. 
        - 1.-a -
         Fue sólo más tarde — ¿horas, o semanas 
          más tarde? — que encontré su libro de los remolinos 
          encima del acantilado. Y cuando me agacho para cogerlo, resulta ser 
          real.
        La niebla intentó tragarme allí mismo, pero me agarré 
          a la firme realidad del libro, y no le dejé. No dejé que 
          el aturdimiento me quitase la razón.
         
        - 2 -
        
        (Hoja encontrada en Edanna, en 
          el tronco hueco)
        
          El libro está sobre el suelo del colmillo, con su panel de remolinos 
          extendiendo sus brazos como tentáculos para cogerme. Quiero cerrar 
          los ojos, para impedir que esas falsas ilusiones me succionen hacia 
          la niebla. No quiero que esos brazos rotatorios me toquen.
        ¿Por qué? ¿Por qué tengo tanto miedo de 
          su libro?
        Quiero recordar. Tengo que hacerlo. Creo...
        Creo que este hombre puede haber venido antes a nuestro pueblo. Pero 
          era más jóven entonces. Con el pelo oscuro. alto. Vestido 
          con esas extrañas ropas marrones largas y sueltas. También 
          entonces llevaba un libro en las manos, y siempre lo está usando. 
          Siempre tomando notas. Lleva los ojos cubiertos por gafas gruesas, pero 
          su cara es cálida y amistosa. Me dice su nombre. Dice que es 
          Atrus. 
        Ahora lo recuerdo. Su nombre es Atrus. 
        Atrus dice que ha venido a nuestro pueblo desde un lugar 
          lejano porque quería aprender acerca del árbol. Dice que 
          
          
          - 2-a -
         sólo se quedará poco tiempo.
        No quiere detener nuestras inacabables labores. Dice que quiere ayudar, 
          si le dejamos. 
        Oh, Tamra. ¿Por qué le dejamos?
        Sigue escribiendo, Saavedro. Toma nota de todo.
          Este Atrus se quedó con nosotros varios meses. Le enseñé 
          a recortar las delicadas raíces del Entramado. Cómo unir 
          los brotes viejos a los nuevos para fortalecer las paredes de las casas. 
          Le cuento las tradiciones del Entretejido. Cómo, usando las esporas 
          para dar soporte a las ramas jóvenes, mantenemos vivo el Entramado. 
          Quiere aprender todo lo que yo sabía. Quiere que Narayan sobreviva.
        Le llevo a la grieta, donde el mar fluye a través 
          de las fisuras del mundo. El vapor asciende desde la catarata. Las esporas 
          de bejín ya están listas para su vuelo. Nos encontramos 
          en las sombras del atardecer, viendo el inicio del ascenso de las esporas. 
          él dice que parecen como perlas contra el fondo del cielo. Y 
          señala con el dedo a una de ellas. Es más pequeña 
          que el resto. Lo suficientemente pequeña para entrar en el nicho 
          que esa mañana hemos tejido en las ramas. Tiene la piel de un 
          blanco lechoso. Con un ligerísimo toque de rosa.
        
        - 2-B -
         Esa, dijo Atrus. Esa será más que suficiente para soportar 
          el peso de la nueva habitación de tu hija, si no me equivoco. 
        
        Recuerdo que asentí con la cabeza. Y luego saqué mi caramillo 
          y empecé a tocar. Atrus permaneció de pie junto a mí, 
          manteniendo la respiración, mientras mi canción atraía 
          cada vez más a la espora hueca. Tan pronto como estuvo cerca, 
          echó la red y la atrapó.
        Esto es lo que recuerdo. 
        Es por ello que dije que me podía enviar sus hijos.
        - 3 -
        
 
        
        (Hoja encontrada en Amateria, junto 
          al puesto de mando "Puzzle")
         Concéntrate, Saavedro. No debes dejar que la niebla venga y 
          te trague. Hay largos períodos de tiempo, creo. Días. 
          Puede que meses a la vez, cuando soy incapaz de recordar lo que he hecho. 
          La niebla me envuelve con tal espesor, que no llego a ver ni mi propia 
          mano. Me esfuerzo una y otra vez, pero no consigo nada. Creo...
        Creo que su hijos vinieron a visitarnos dos veces.- a Narayan.
        La primera vez, Atrus me pidió que los conociera. Me dijo que 
          iban a venir a través del libro.
          Dice que no entenderán cómo tus mundos encajan entre sí, 
          pero los utilizarán para abrir el escudo. Narayan, dice, es donde 
          coinciden sus lecciones. Narayan es la suma de lo que deben aprender.
        Recuerdo. Tamra estaba tallando una máscara del Espíritu 
          en el árbol el día que llegan los chicos. Me tira de la 
          manga para llamarme la atención. Señala a una nave planeadora 
          en el cielo. Me sorprende intensamente lo jóvenes que son los 
          chicos. Se parecen tanto a su padre. 
        - 3-a -
         Y, sin embargo, son distintos. Son más impacientes. Y les enfurece 
          no ser tratados como hombres.
          Los llevo a nuestra casa. Les digo que les voy a enseñar cómo 
          cuidarla. Digo que vamos a cuidar del árbol del Entramado para 
          que crezca muy alto. Me preguntan por qué tienen que trabajar 
          tanto. Me dicen...
        ¡¡¡No, Saavedro!!! aquello fue después. aquello 
          fue después de que Atrus se los llevara. Tú lo sabes, 
          porque cuando tú los ves diciendo estas cosas, son más 
          mayores. Sus caras se han vuelto angulares y duras. Han crecido, se 
          han hecho hombres. Y sus ojos reflejan algo oscuro.
        Te dicen que han vuelto para solucionar el problema de Narayan.
        
        - 4 -
        
 
        
        (Hoja encontrada en el laboratorio en la cima de 
          la Gran Torre)
        
        Sirrus y Achenar.
        Las paredes se vuelven rojas de vapor y ramas estranguladoras. Veo 
          sus caras hinchadas, riéndose de todo. Recuerdo cómo mintieron. 
          Recuerdo lo que hicieron. Me trajeron aquí para morir. Los seguí.
        Las raíces del entramado estaban negras de tanta maleza.
          Las esporas de bejín flotaban en el vapor, y explotaban. allí 
          no había nadie para guiar las esporas hacia las ramas. Nadie 
          esperaba para representar el entretejido ritual. La lucha había 
          dividido a mi gente. 
        No les importaba. No les importaba. Querían que Narayan muriese.
        - 5 -
        
        Lo he conseguido. He utilizado su libro de remolinos para seguirle 
          por el vínculo. Toqué su panel brillante con la palma 
          de mi mano y sentí el cosquilleo. De repente noté cómo 
          se me retorcía el estómago con un escalofrío. Y 
          enseguida caí hacia el interior de la página.
        Esto ya me ha ocurrido antes. Lo sé. Ocurrió la primera 
          vez que vine a este lugar. Cuando seguí a sus hijos asesinos 
          desde Narayan. Ocurrió cuando utilicé sus libros ocultos. 
          Y ocurrió cuando por fin abrí la máquina. Justo 
          antes de la primera vez que la niebla se comiera mi mente.
        La niebla no me encontró esta vez. Cuando abrí los ojos, 
          estaba solo en una habitación. Estaba de pie en la casa de mis 
          traidores.
        No me podía mover. Tenía miedo. Pensaba que sabrían 
          que había venido, y que me estarían esperando. Igual que 
          me habían estado esperando dentro de este mismo colmillo. Tenía 
          miedo de que me atacasen otra vez. De que me atacasen las serpientes 
          venenosas...
        Pero el silencio no se rompió.
        - 5.-a -
        
          Toda la casa estaba en calma. Y sin saber realmente lo que hacía, 
          empecé a buscar. En todas las habitaciones. En todos los pisos. 
          En todos los armarios. Encontré sus diarios. Los diarios sin 
          fin de Atrus. Encontré el libro que me devolvió a este 
          mundo. El mundo-lección que él llama J'nanin.
        Oh Tamra, mi amor. ¿Cuánto tiempo llevo atrapado aquí? 
          ¿Cuántos años de mi vida he pasado devorado por 
          la niebla?
        El rostro que veo en la laguna no es el que recuerdo haber poseído 
          jamás. Es mucho más viejo. Mucho más salvaje. Pero 
          soy yo. Es Saavedro. Y recuerdo lo que hicieron. Cómo mataron 
          a mi pueblo.
        
        - 5.1 - 
        
 
          
        (Hoja encontrada en Amateria, junto 
          al puesto de mando con segmentos blanco/azules)
         Los recuerdos me invaden demasiado deprisa. Me pasan por la cabeza 
          a gran velocidad, llenándome el alma de desesperación. 
          Y cuanto más pienso que no se puede hacer nada, que nadie puede 
          estar vivo afuera de su escudo, más rápidamente entra 
          la niebla.
        Me puedo perder en la niebla.
        Cuando es lo suficientemente espesa, puedo relajarme y sentirme seguro. 
        
        Puedo empezar a olvidar.
        Pero no debo olvidar. Debo recordar todas las mentiras que contaron 
          a mi gente. ¡Cómo nos manipularon a todos para conseguir 
          lo que querían! Me dijeron que habían venido para arreglar 
          mi mundo. Me pidieron que organizara una reunión con los Mayores. 
          Los libros que trajeron consigo mostraban otros mundos - bellos lugares 
          donde la gente no tenía que trabajar tanto para sobrevivir. Dijeron 
          a mi gente que Atrus había escrito estos libros. Que él 
          había escrito Narayan, pero que 
        
        - 5.1-a -
        
          había hecho nuestro mundo inestable.
          Dijeron que él quería hacernos esclavos del árbol. 
          Me preguntaron: ¿No recuerdas, Saavedro? Nuestro padre escribió 
          este mundo para enseñarnos. Para mostrar a sus hijos lo que no 
          debe ser una época.
        No sé qué decir. No sé cómo podría 
          ser verdad. Pero, ¿porqué iban a mentir? ¿Porqué 
          habría mentido Atrus? Los mundos que nos mostraron en esos libros...
        Los Mayores se niegan a creer en ellos. Dicen que no podemos abandonar 
          el árbol. Durante miles de años hemos cuidado de las raíces 
          entramadas. Sin nuestras tradiciones, moriremos.
        No quiero que muramos. ¡No quiero! Pero Sirrus y achenar dijeron...
        Dijeron que volverían, Saavedro. Igual que Atrus te lo dijo 
          también a tí una vez. Dijo que volvería, pero luego 
          no lo hizo. No lo hizo.
        Y tendrás que hacerle pagar por ello.
        
        - 5.2 - 
        
 
          
         Ya he vuelto varias veces a Tomahna. Estoy buscando alguna 
          señal de mis hijas. Estaba seguro de que volverían corriendo 
          a su padre, pero ha pasado tanto tiempo. Tantos años durante 
          los que olvidarse de mi gente.
        ¿Es eso lo que ocurrió, Atrus?
          Seguro en tu nueva y bonita casa, disfrutando de la vida con tu querida 
          esposa y tu familia.
          ¿Estabas tan ocupado imaginando nuevos mundos que te olvidaste 
          de los que ya habías creado?
        Tengo que proceder con gran cuidado. No debo permitir que se enteren 
          de que estoy libre. Leeré todos los diarios que encuentre, para 
          averiguar dónde se esconden sus dos hijos. Y cuando haya encontrado 
          de nuevo a los hijos — cuando tenga junta a toda la familia — 
          los abatiré. Atrus y su familia sufrirán.
        Igual que yo he sufrido durante años.
        - 5.3 -
        

        (Hoja encontrada en Voltaic, en 
          el ascensor)
        Ahora lo veo todo tan claro. Tan claro, sin niebla que se lo lleve. 
          Cómo los jóvenes del pueblo no querían escuchar 
          a los Mayores. Cómo se quedan al fondo de la habitación, 
          albergando un creciente nudo de ira en sus corazones. Gritan, ¿Por 
          qué tenemos que detenernos a vuestras reglas, viejos? ¡No 
          os queda nada de vida! ¡La disteís hace décadas 
          al árbol!
        Tamra quería llevarse a los niños a casa. No le gusta 
          la forma en que se caldean los ánimos. Haz algo, Saavedro, susurra. 
          Diles que dejen de gritar, haz que escuchen. Diles...
        ¿Qué, mi amor? Decirles, ¿qué? ¿Que 
          sus jóvenes vidas no les pertenecen sólo a ellos? ¿Que 
          nuestra gente está destinada a ser los esclavos de nuestro mundo?
        Sirrus y achenar pueden ver la confusión que están causando. 
          Los sorprendo fijándose en las caras de los hombres, tratando 
          de averiguar quiénes de ellos están más insatisfechos. 
          Más tarde, se dirigirán a aquellos hombres en secreto. 
          Exhortarán a los descontentos a
        
        - 5.3-a -
         boicotear nuestros rituales. Manipularán su juventud e insatisfacción. 
          Y los jóvenes empezarán a formar bandas. abandonarán 
          nuestras tradiciones, se sublevarán contra los Mayores, y seguirán 
          a los hermanos. Comenzarán los disturbios. Y se descuidará 
          el árbol.
        Oh, Tamra. ahora parece todo tan evidente. Pero, ¿por qué 
          no lo pude ver entonces? Todas las mentiras que decían los hermanos. 
          Todos los rumores que lanzaron para conseguir el poder y cuando nuestro 
          mundo empezó a desmoronarse a nuestro alrededor, ¿por 
          qué no me di cuenta de que ni a Sirrus ni a achenar les importaba? 
          Ellos nunca creyeron la verdad de nuestras tradiciones. Nunca entendieron 
          el trabajo que tuvimos que hacer. Sólo sabían que había 
          llegado el momento de partir.
        Y cuando lo hicieron, se dejaron su libro de vínculos, sabiendo 
          que yo lo utilizaría para perseguirlos. Me atrajeron a este mundo, 
          me ataron y me dejaron aquí para morir.
        Porque no les paré cuando debí haberlo hecho.
        - 5.4 -
        

        Sirrus y achenar no están en Tomahna. Cada día que pasa 
          estoy más convencido de ello. Los hijos de Atrus no están 
          aquí.
        ¿Qué ocurrió, Atrus? ¿Te cansaste de ellos, 
          de la misma manera que te cansaste de Narayan? ¿Los abandonaste, 
          igual que abandonaste a mi gente detrás de tu escudo?
        No importa. Todavía puedo vengarme contra su padre. ahora que 
          ya estoy liberado de J'nanin, puedo vengarme de todos los muertos de 
          mi mundo.
        Ya he vuelto a abrir todos sus otros libros. He empezado a hacer cambios 
          en esos mundos, usando sus propias lecciones contra él. Todavía 
          hay mucho más trabajo por hacer, pero acabaré atrayéndole 
          a este colmillo. 
        
        
 
        
        - 5.4-a - 
         Encontraré una forma de hacer que me siga hasta aquí 
          desde Tomahna.
        Por el momento, me concentraré en el Orbital. No se trata de 
          una parte natural de su mundo. El material que crea no se parece a nada 
          que yo haya visto antes. Me recuerda,
        
        sólo un poco, al escudo. Y si se trata del mismo 
          material, no se puede dañar. Pero tal vez pueda dañar 
          a los otros dispositivos.
        - 6. -
        
        (Hoja encontrada en Edanna, en 
          el subsuelo)
         He profanado el poema que él puso en las columnas. Ya no podía 
          soportar ver el arte de Narayan en sus mundos. Creo que puedo hacer 
          algo con la savia para cubrir el segundo, pero no estoy seguro de qué 
          hacer con la isla. No sé cómo alterar la corriente.
        ¿Y si trajera una pequeña cantidad de esa piedra flotante 
          tan poco común de amateria? Hay algo en la composición 
          de la roca en esa época que atrae y repele otras piedras con 
          bastante fuerza. Tal vez, si introduzco un poco de esa roca en la tierra 
          de la isla, su efecto será justo lo suficiente para dañar 
          el ultimo poema.
        Tendré que realizar algunos experimentos.
        - 6.1 -
        

        (Hoja encontrada en Voltaic, ante 
          la sala de calderas)
         ¡Me está llevando demasiado tiempo! Cada minuto que paso 
          buscando su casa corro el peligro de que alguien llegue y me encuentre. 
          Traería sus diarios al colmillo, pero me temo que los echaría 
          de menos. Ya incluso temo lo que él sepa.
        Temo lo que su esposa pudiera saber.
        Ella casi me cogió la última vez. Me había trasladado 
          directamente a la habitación solar por el vínculo. Iba 
          caminando hacia su estudio cuando oí los pasos de alguien acercándose 
          por el vestíbulo. Estaba hablando con alguien. Se reía. 
          Y, por un instante desgarrador, creí que era Tamra.
        Luego recordé que mi Tamra está muerta. La dejé 
          muriendo cuando salí en persecución de los hermanos. Le 
          dije que fuera al acantilado, que llevase allí a nuestras dos 
          niñas y que se escondiese. Cogí el collar que me dio como 
          recuerdo y le dije...
        ¡Oh Dios, Tamra! ¡Te dije que todo saldría 
          bien! Durante
          - 6.1-a -
         años recé para que mis palabras no fuesen una mentira. 
          Para que hubieses conseguido llegar al acantilado. Para que estuvieses 
          cuidando de las enfermas raíces del Entramado. Para que estuvieses 
          cuidando de las enfermas raíces del Entramado.
        ¡Cómo recé, Tamra, junto al Entretejido!
          Hasta que abrí esta máquina. Vi a Narayan a través 
          de su escudo.
        Y, aunque la barrera me mantuvo encerrado en el interior, lo sabía. 
          Sabía que el árbol del Entramado había muerto. 
          Narayan no puede sobrevivir sin el árbol. Nadie puede seguir 
          con vida fuera de su escudo.
        En la casa de Atrus, sabiendo que mi esposa e hijas estaban muertas, 
          sentí la niebla invadirme otra vez. Y por mucho que quisiera 
          rendirme al aturdimiento, no podía, No podía dejar que 
          la esposa de Atrus me encontrara allí.
          De alguna manera, vadeé la bruma. Conseguí llegar al estudio, 
          y encontré el libro que me permitiría volver a J'nanin. 
          Estaba justo donde lo había dejado. allí donde ellos no 
          lo pudieran ver. Puse la mano sobre el panel. Oí - 
        - 6.1-B-
         abrirse la puerta detrás de mí. Y a continuación 
          el estudio desapareció.
          Casi me vió. Lo sé. Pero esta vez sí que fué 
          por los pelos. Si el libro no hubiera estado allí donde lo había 
          dejado...
        La próxima vez, me traeré un libro de una de sus otras 
          épocas. Por si acaso pasa otra vez.
        -6.2-
        

        (Hoja encontrada en Amateria, cerca del piso alto 
          del ascensor)
         Mis intentos de producir un híbrido carnívoro han tenido 
          un éxito limitado. Creí que mis progresos eran mayores, 
          pero la vida que crece en el bosque no es como las plantas de Narayan. 
          Es mucho más tenaz.
          Menos susceptible a los injertos. ¿Y si intentara mezclar especies 
          de la ciénaga?
        
        
        
        - 6.3 -
        

        ¡¡No!! ¡No puede ser verdad!
          ¡Tiene que ser que sus diarios me engañan!
        Dice que los ha traído. Dice que ha dado nueva vida a sus hermanos 
          de D'ni. Pero ¿cómo?
          ¿Cómo puede un hombre tener tanto poder? ¿Cómo 
          pueden los escritos de un hombre reavivar un mundo muerto?
        No sé qué quiere decir esto. En nombre de todo lo que 
          es sagrado, Tamra, ¿qué puede significar?
        No cambia nada. Todavía puedo seguir como había planeado. 
          Todavía puedo buscar venganza para mi gente. Haré que 
          sufran mis enemigos.
        Junto al entretejido, Tamra. Esto lo cambia todo.
        
        - 6.4 -
        
 
          
        (Hoja encontrada en Voltaic, en 
          la parte alta, sobre la rejilla)
         
La 
          pared de la caverna está casi lista. Durante semanas le he estado 
          sacando brillo, alisando las grietas para dejar la superficie suave. 
          No he podido dormir mucho durante estas últimas semanas.
          Temía no despertar nunca más. Pero si puedo hacerle ver 
          todo lo + que 
ocurrió, 
          si pudiera mostrarle el dolor que causó su familia, habrá 
          merecido la pena. Mañana empiezo a mezclar las pinturas.
          He encontrado una forma de reprogramar su dispositivo de escaneo.
        
         
        - 6.5 -
        

        Es necesario rescatar piezas de otro mecanismo en el colmillo, pero 
          creo que los engranajes se pueden hacer funcionar a mano.
        
        
        - 6.5.1 -
        


        (Hoja encontrada en Edanna, en 
          el tronco hueco azul)
        
        La última pintura está casi acabada. Ha sido difícil 
          trabajar con este calor, pero es necesario que vea todo lo que ocurrió. 
          al seguir las instrucciones que he dejado, sentirá el dolor que 
          yo he sufrido.
        De lo contrario, tal vez los dos muramos.
        - 6.5.2 -
        
 
          

         Está acabada. Ya está todo listo para la 
          llegada de Atrus. Esta noche dormiré entre los fantasmas. Y mañana 
          me trasladaré a Tomahna por el vínculo.
        Que los espíritus de mi gente sirvan para guiarme.